Los dioses estan locos
Lo usual
Usualmente cuando posteo no es tanto una expresión cuanto una descarga. En un principio (hace un año) creí que blogspot era la respuesta personal hacia el desconecte virtual-social. En un link, puedo dar la oportunidad a que alguien me conozca más, sin mayor esfuerzo extra. En cierto aspecto esta forma resulta poco natural. No hay detector de mentiras que pueda desmentir a alguien que se engaña a sí mismo al instante. Para eso se necesitaría un detector "ontológico". Las acciones comúnmente no mienten.
En fin, un amigo me dijo que si fuéramos sinceros con nosotros mismos, veríamos nuestros defectos todo el tiempo. La consecuencia de tal costumbre no necesariamente conduce al callejón sin salida de la autocompasión, porque las acciones tomadas en base a las mismas condiciones difieren muchísimo de persona a persona.
"Quiérelas por sus virtudes, ámalas por sus defectos..." este dicho de abuelita expresa para mí más que Kant y Leibnitz.
En exceso, hasta la verdad mata. Muere el misterio que nos hace seguir adelante cada día.
Ni los sentimientos son tan únicos como podríamos esperar. Tocan a la puerta y decidimos o no abrirles.
Pero en cambio los defectos siempre estarán. Coincidir en ellos es la mayor de las delicias y una e las más duraderas. Cuántas relaciones han desaparecido sólo por que uno de sus miembros cambia algún aspecto clave que los unía, incluso para bien.
En fin, me doy cuenta que gran cantidad de mis posts son residuos que, en cuanto aplasto publicar, se vuelven ajenos para mi propio bien. Una "papelera de reciclaje" de ideas que están próximas a extinguirse pero aun estorban. En ciertos asuntos la convergencia es lo que menos se desea y lo que más nos llenaría. Lo mismo que compartimos nos separa. Y ahi estamos tan cerca y tan lejos como queramos, o más bien como nos atrevamos. Todo cambia...
Despues de un tiempo uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma.
Y uno aprende que el amor no significa recostarse y una compañía no significa seguridad, y uno empieza a aprender.
Que los besos no son contratos y los besos no son promesas y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos.
Y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno del mañana es demasiado inseguro para planes.
Y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.
Despues de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calor del sol quema.
Asi que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno es realmente fuerte, que uno realmente vale, y uno aprende y aprende, y con cada adios uno aprende.
- J.L. Borges
++posted by David Temper
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9:32 a.m.
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